Estancado, el tiempo no pasa en ti, te encuentras encerrado, no eres libre, no actúas como tú eres, tu sonrisa se la llevo el viento, en una casa que no pasa el tiempo, te encuentras sentado, no tienes ilusión, solo te rodean tres personas en tu vida, las únicas que te han soportado todo lo que has hecho, o que no se pueden ir, por que están bastante atados a ti.
Miras el reloj y piensas que pudo haber sido mejor, hacer las cosas bien con ilusión y amor, pero preferiste hacer las cosas a lo grande para ser recordado, envejeciste como un cascarrón, y ahora miras el reloj de esa habitación, que solo tuvo color, cuando tenías amor, cada segundo es eterno, y cada minuto parece un año, no sabes que hacer, no te motivas por nada.
Hasta que vez a esa persona sonreír, sientes que vuelves a encontrar el color, la ilusión, que sólo has sido feliz gracias a ella, que te ayudó siempre, y no supiste agradecérselo en toda su vida, vas a su lápida y cada lágrima que llora, significa cada años que fuiste feliz gracias a ella, nunca encontrarás a nadie que te vuelva la vida de color , como lo hizo ella.
Ahora solo eres feliz gracias a pensamientos, llenos de recuerdos, y un dolor interminable, que desde que ella no está todo se convirtió en oscuridad, y tú sigues ahí atascado en el tiempo, pensando en cada beso que le podrías haber dado, cada vez que te sonreía, cada vez que te acariciaba, que te hacía la cama, que te tocaba el pelo, con la llema de los dedos, cada vez que te ponía un vaso de agua sin antes pedírselo, y cada vez que decía tu nombre, añoras hasta eso.
Nunca encontrarás a alguien que diga tu nombre de esa manera tan dulce.
Miras el reloj y piensas que pudo haber sido mejor, hacer las cosas bien con ilusión y amor, pero preferiste hacer las cosas a lo grande para ser recordado, envejeciste como un cascarrón, y ahora miras el reloj de esa habitación, que solo tuvo color, cuando tenías amor, cada segundo es eterno, y cada minuto parece un año, no sabes que hacer, no te motivas por nada.
Hasta que vez a esa persona sonreír, sientes que vuelves a encontrar el color, la ilusión, que sólo has sido feliz gracias a ella, que te ayudó siempre, y no supiste agradecérselo en toda su vida, vas a su lápida y cada lágrima que llora, significa cada años que fuiste feliz gracias a ella, nunca encontrarás a nadie que te vuelva la vida de color , como lo hizo ella.
Ahora solo eres feliz gracias a pensamientos, llenos de recuerdos, y un dolor interminable, que desde que ella no está todo se convirtió en oscuridad, y tú sigues ahí atascado en el tiempo, pensando en cada beso que le podrías haber dado, cada vez que te sonreía, cada vez que te acariciaba, que te hacía la cama, que te tocaba el pelo, con la llema de los dedos, cada vez que te ponía un vaso de agua sin antes pedírselo, y cada vez que decía tu nombre, añoras hasta eso.
Nunca encontrarás a alguien que diga tu nombre de esa manera tan dulce.
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